prioridad

hay gente que cree que leer es una pérdida de tiempo. que comprar un libro es un gasto absurdo. vale, no lo entiendo pero lo respeto, a cada uno le gusta lo que le gusta y sobre eso no hay nada escrito.

pero el colmo es cuando una persona está leyendo y los demás opinan que eso no es importante. me ha pasado estar leyendo en la playa y se me acerca alguien con quien no tengo mucha confianza y me pregunta: "¿qué estás haciendo?" joder, tío... no es bastante evidente que estoy tirao en la playa leyendo? pues no, se te pueden sentar al lao y comentarte su último desayuno aunque tú estés con el libro entre las manos y te lo acerques a la cara o pongas el dedo en la línea para mirar al tipo a la cara pero sin perder el hilo de tu lectura, que es lo que quieres continuar. nada, hasta que no seas directo o él se aburra, no hay nada que hacer.

y hoy lo he flipado. me han mandado una carta en formato pdf por correo electrónico. es de un laboratorio y afecta a la forma de trabajar que habrá ahora con la nueva legislación para el supuesto ahorro farmacéutico (que es un truño, porque lo que se van a ahorrar en farmacia, que es mucho menos de lo que están diciendo, se lo van a gastar en hospitales, que es mucho más que el ahorro, pero como los políticos son como son y prefieren ahorrar 3 ahora y gastar 50 en 4 años, que ya es otra legislatura, pues ya está... pero vamos a dejarlo, que no me centro). el caso es que yo estaba enfrascado en una lectura tediosa y odiosa* cuando una mujer entra, dice que quiere hablar conmigo, se me viene (error, el ordenador con acceso a internet está cara al público) y me dice que deje lo que estoy haciendo porque lo suyo es muy importante. le digo que espere 1 minuto y que estoy con ella y me dice que no, que luego jugaré. eso lo dijo mirando la pantalla (se coló por dentro, a la gente le gusta que los demás vean que tienes confianza con ellos, nucna he sabido de dónde viene esa forma de vacilar a los demás).

así que, mirando una carta escrita en pdf en la mitad izquierda de la pantalla y unas tablas que salen en la nueva ley en la mitad derecha, ella consideró que eso era un juego sin importancia que merecía la pena ser interrumpido por su cháchara. así que me resigno, le digo que qué le pasa y me empieza a comentar nosequé rollo sobre una crema para pegar los dientes que se le vendió pero que no le ha gustado mucho y quería devolverla. encima, con todo el morro, me cuenta que la ha usado casi entera para estar segura de que no le venía bien, porque ella no devuelve las cosas así proque sí, ella las devuelve con fundamento.

a partir de entonces, me tocó los cojones sobremanera, dejé que siguiese hablando mientras yo la miraba asintiendo y esperando cualquier signo de interrogación perceptible en su tono**, con la cabeza arriba y abajo como los perritos esos de los salpicaderos y bandejas traseras de los coches y los ojos casi en blanco. entonces noté ese timbre, el de la pregunta. no sasbía claramente qué me había preguntado, pero tenía clara la respuesta: "es que esa crema la hacen así, no es que sea mala". si tú usabas unas y te has pasado a otra porque era más barata, es normal que sea peor. así que un rato más de ella volviéndome a explicar todo el proceso***, enseñándome el interior de la boca (a dios gracias doy porque no se sacó la dentadura, que eso ya me lo han hecho otras veces). y yo seguía en mis trece de decirle que no a toda pregunta que me hiciese, sin llegar a escucharla del todo. he de reconocer que estoy desarrollando esa habilidad y que es una suerte que empiezo a dominar con cierta maestría. es posible que llegue, como en mis últimos años de instituto y primeros de facultad a tener la capacidad de oír dos conversaciones imultáneas, o, mi mayor hito en este sentido: escuchar una y participar en otra sin desentonar lo más mínimo.

y la señora se fue a regañadientes, llevándose el bote usado porque le quedaba algo y, aunque alprincipio me dijo que era una porquería y que no valía para nada y me la había entregado con la orden de que la tirase a la basura, decidió que no era tan mala.

en fin, está claro que la prioridad de la señora era el pegamento de dentaduras y que a mí me podían dar morcillas porque total... sólo estoy leyendo un poquillo.

menos mal que nos han traído churros pa desayunar y que ahora me voy a la playa dentro de unas horas. así me desquito.

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*no me gustan los abogados, las abogadas tienen un pase según quién sea, no megusta el lenguaje legal, no me gusta la actitud del mundo de la legislación y, sobre todo, no me gusta que los que hagan leyes no tengan ni zorra de lo que pasa en el mundo real.
**lo que viene a ser un salvapantallas humano en toda regla.
***¿de dónde sale la creencia popular entre los mayores de que si una cosa la repites muchas veces, acabas por convencer al otro de que tienes razón?