mediterráneo pal cumple de meryta, que es mediteránea ella

30 de septiembre, principios del otoño, cuando el sol, en balerma, ya se pone sobre el mar y no sobre las montañas...

Quizás porque mi niñez sigue jugando en tu playa
y escondido entre las cañas duerme mi primer amor,
llevo tu luz y tu olor por donde quiera que vaya.
y amontonado en tu arena guardo amor, juegos y penas.

Yo, que en la piel tengo el sabor amargo del llanto eterno,
que han vertido en ti cien pueblos de Algeciras a Estambul
para que pintes de azul tus largas noches de invierno.
A fuerza de desventuras, tu alma es profunda y oscura.

A tus atardeceres rojos se acostumbraron mis ojos
como el recodo al camino.
Soy cantor, soy embustero, me gusta el juego y el vino.
Tengo alma de marinero.

Y qué le voy a hacer si yo... nací en el Mediterráneo.
Nací en el Mediterráneo.

Y te acercas y te vas, después de besar mi aldea,
jugando con la marea, te vas pensando en volver.
Eres como una mujer, perfumadita de brea,
que se añora y que se quiere, que se conoce y se teme, ay.

Si un día para mi mal viene a buscarme la parca,
empujad al mar mi barca, con un levante otoñal
y dejad que el temporal desguace sus alas blancas.
Y a mi enterradme sin duelo, entre la playa y el cielo.
En la ladera de un monte más alto que el horizonte.
Quiero tener buena vista.
Mi cuerpo será camino, le daré verde a los pinos
y amarillo a la genista.

Cerca del mar, porque yo... nací en el Mediterráneo.
Nací en el Mediterráneo. Nací en el Mediterráneo......

de joan manuel serrat

una canción que siempre me impacta. me recuerda a balerma, cómo no. cuando la oigo veo los levantes de balerma, los ponientes cuando era pequeño, los barcos de los pescadores lamentablemente, a motor ya. un motor que hacía un ruido de mil demonios. lo escuchaba desde la ventana de la habitación de "los niños" de casa de mi abuela, el 21 del paseo marítimo antes de que existiese nada parecido a un paseo marítimo. eran las 7 o las 8 cuando llegaban los pescadores. me levantaba para ir a recoger los cangrejos ermitaños que tiraban de sus redes porque todo el mundo sabía que la parte carnosa de su cuerpo era la mejor carnada para pescar en la orilla con una caña que nos hacíamos nosotros con un corcho de vino, una piedra o una plomá que nos encontrábamos buceando y una caña que cogíamos de los cañaverales. el anzuelo del 8 y el rollo de nylon era lo único que comprábamos.


recuerdo las mañanas con el mar planchado. y mi madre levantándome diciendo que el mar era hoy una balsica de aceite; y casi siempre cambiaba luego,... o se metía el levante o el poniente. si el poniente duraba varios días había que cerrar la puerta de casa. y si era después de las fiestas, mi abuela hacía buñuelos y los removía (para formar el agujero) con varillas de los cohetes que le traíamos los nietos.

recuerdo levantarnos a las 3 para ir a la panadería con un litro de leche que cogíamos de casa, comprar bollos y comerlos en el paseo marítimo hablando tranquilamente.

¿cómo no me va a gustar esta canción? y ese sitio?