semana desconectado

el viernes pasado entraron unas máquinas a aplanar el jardín y creo que aplanaron más bien el cable del teléfono. así que no podía recurrir a telefónica para arreglarlo (por una vez y sin que sirva de precedente, la culpa fue nuestra).

así que llevo una semana en la que me he tenido que callar algunas muestras públicas (vía este blog que leen ahora) de desafecto hacia el mundo, irritación hacia la práctica totalidad de la clase política española y asombro e impotencia ante los medios de comunicación y su supuesta imparcialidad (si los medios de comunicación españoles son imparciales, yo soy un chino del siglo XIV con ascendencia rumana)

sólo recordaré lo de ayer. las noticias de canal sur por la noche. ese medio plural, moderado y ecuánime (me parto...). resulta que en las noticias deportivas hablaron del fútbol europeo (haya o no equipos españoles de por medio), de un equipo de fútbol de eeuu de ruta turística por nueva zelanda (no sé en qué sentido nos va o nos viene a los andaluces ese hecho), de un campeonato de golf en el que no había ningún español (la atracción era que había un tipo blanco que se apellidaba woods, como el tiger, que, por primera vez en su vida, hacía algo decente en un torneo de la pga), de rallies (donde sí compiten dos españoles), de unos coches de la nascar americana que se daban paseítos por ny (no sé si hay 1000 personas en andalucía realmente interesadas en la noticia, pero me parecería increíble llegar a 200), noticias de la nba... todo eso el mismo día en que el unicaja, el barcelona, el tau y el madrid había jugado partidos de la liga europea de baloncesto. pero eso no era noticia. es baloncesto y eso no interesa. no entiendo cómo se maltrata tanto al deporte que más alegrías nos da últimamente y el segundo en número de jugadores de españa. ¿por qué los medios de comunicación no quieren dar un trato digno a este deporte?

lo de anoche no fue sino el corroborar lo que me deja estupefacto cada día. ese odio a lo americano acompañado de un seguimiento masivo de todo lo que hacen. es lo típico de la españa profunda de hace 50 años: la envidia lleva al falso desprecio. como con eso no conseguimos nada, los odiamos. y como los odiamos pero es porque somos envidiosos, somos capaces de vivir su vida y seguir criticándolos y diceindo que son lo peor.

menos mal que no he tenido internet, si no os habría cansado con el mismo tema todo el tiempo...