un blog en el que voy a hablar de lo que me ocurra. será un diario en el que no contaré todo lo que siento, pero sí cosas que sienta y crea que debo expresar. y quien quiera puede participar libremente. por cierto, me he dado cuenta de que se ve mejor con el mozilla firefox que con el explorer

sábado, agosto 11, 2007

deben ser cosas de la edad, y eso hay que respetarlo

esta noche era la continuación de mi plan de fin de semana de guardia, trabajar por las tardes y salir el viernes en ayamonte y el sábado en la antilla y así tenía playita por las mañanas. esfuerzo aparte, 500 km pa conducir en 4 tramos y dinero en gasola y copas... me parecía un plan perfecto.

pues no, resulta que ahora los llamo a la antilla y dicen que su plan es terminar de cenar, tomarse una copita y pa casa. así que las 2 o 3 parejitas (javi-lou y robe-silvia sí están, de pirra y rosa no sé nada) les falta ponerse ropa arreglaíta y pasear de la mano por el paseo marítimo de la antilla. es más, podrían incluso ir hablando silvia con lourdes y javi con robe a 3 metros de distancia... no sé, esperemos que no lleguen a tanto o, al menos, que lo hagan de forma puntual.

con todo esto no trato de reirme de ellos ni de meterme con su actitud, es simplemente hacer ver que ellos están en una situación diferente a la mía ahora mismo. son parejas estables (matrimonio y casi matrimonio) que comparten un proyecto de vida en común, casa y, sobre todo, tiempo. y a mí eso no me parece mal. de hecho, algunas veces lo he hecho. pero sigo buscando oportunidades para salir, bailar, hablar en grupo, hacer el mongolo y reirme. ¿soy un inmaduro? ¿se supone que a partir de los 23 no debes hacer esas cosas o hacerlas cada vez menos? ¿cuándo se deja de hacer del todo? ¿por qué con 30 años me miran mal si digo que me apetece salir de marcha o hacer un botellón? si es algo que me gusta y que siempre he hecho con agrado... no entiendo cómo puede llegar a ser válida una excusa como "es que ya no tienes edad para hacer esas cosas". eso me vale si con 30 años me intento apuntar en un campeonato de baloncesto sub-12, pero no es el caso.

no entiendo, no entiendo. me replanteo muchas veces si mi vida está yendo por otros derroteros, si sigue unos caminos equivocados pero, al fin y al cabo, ¿qué importa el camino si alcanzamos la meta? como dice don gustavo mata a todas las promociones: "da igual el camino si no hay una meta".

en fin, lo mismo dentro de unos años le hago eso a un amigo que va a visitarme... o no.

2 Comments:

Blogger Valeria said...

No está fácil. El tema de la edad no es menor. A veces me hago la misma pregunta, cuando veo a mis amigas casadas o con guaguas. Creo que el tiempo es una convención, como tantas otras, y uno no puede tomarselo tan en serio. Si a los 30 (o a los 33, 35, 40) me quiero colar en una fiesta universitaria, no debería importarle nadie. Es raro que a todos les parezca maravillloso que uno se adelante procesos (como hacer un doctorado a los 25), pero no que se demore en otros (como casarse, tener hijos o madurar (sin entrar en detalles de qué cresta significa eso exactamente)). Cuando uno no quiere crecer, se dice que tienes síndrome de Peter Pan. Si creces demasiado rápido... no tiene nombre clínico. Cada cosa a su tiempo. O mejor dicho, cada cosa a tu/mi/su tiempo.

9:35 da tarde

 
Blogger Unknown said...

sastamente...

¿pero la sociedad no está preparada para eso? si no, no lo entiendo...

larga vida a peter pan

5:01 da tarde

 

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