momentos
hay momentos en los que alguien debería callarse. y no lo hace.
tengo en muy alta estima a la mayoría de los médicos de españa. creo que tienen una formación sobresaliente (que unos se encargan de continuarla y otros la olvidan poco a poco porque no se actualizan ni pagándoles), hacen un muy buen trabajo en unas condiciones que no están a la altura de sus cualidades.
por supuesto, hay excepciones. hay médicos que ignoran el hospital público excepto para cobrar a fin de mes y para exigir más aunque no vayan ni 10 horas a la semana y dedican ese tiempo a su consulta privada. creo que, en la sanidad pública, deberían cobrar en función del tiempo que estuviesen, no en función de su cargo o del tiempo que lleven.
y hay otro nicho que es el de los médicos de cabecera o de familia. conozco a algunos y, por lo qu em cuentan, hacen bien su trabajo como buenos profesionales que son. pero yo tengo muy mala suerte y a mi alrededor, con los que tengo una relación profesional más o menos distante... no pasa eso. como muestra, 3 botones que me han dejado unas perlitas de me´dicos de los últimos días.
a) entra la señora (casi 80 años) en la consulta de su médico desde hace décadas y se produce esta conversación:
- ay, fulanito... que cogío una purmonía que casi me muero.
- bueno, tampoco pasa nada, no? ya es hora.
b) entra una mujer con su padre (más de 80 años, polimedicado y con bastantes problemas, pero activo aún y luchando contra todo lo que tiene con fuerzas).
paciente: ¿cómo están los análisis, doctor?
médico: vaya alquilando un nicho.
c) un médico iberoamericano está haciendo una sustitución a otro con la plaza asignada. entra una señora en la consulta y se produce lo siguiente:
- ay, hola, muy buenas. que las pastillas y las inyecciones que me mandó la semana pasada no me quitan el dolor. sigo igual.
- ¿se ha puesto una inyección cada 2 días y se ha tomado las pastillas 3 al día?
- sí, claro, como usted me dijo. pero nada, esto no me quita nada.
- lo que pasa es que tiene a satán dentro de usted.
con mucha diferencia, al que más doy la razón de los 3 es al caso c.
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